La Misión de Apoyo al Proceso de Paz de la Organización de los Estados Americanos (MAPP/OEA) se une a la conmemoración del Día Nacional de la Memoria y la Solidaridad con las Víctimas del Conflicto Armado, una oportunidad para dignificarlas, reconocer su trayectoria y reafirmar su respaldo. Para la Misión, hoy las víctimas son resilientes, insisten y perseveran, no solo en mostrar que la paz es el camino, sino en lo importante que es la coherencia entre la voluntad de paz, las transformaciones territoriales, la no repetición y la garantía de sus derechos.

“Asumir la centralidad de las víctimas es un imperativo ético, político y humanitario para la Misión y, en este 2024, tenemos la oportunidad de reafirmarlo con las comunidades, las organizaciones y el Estado Colombiano. A lo largo de nuestra presencia en el país, hemos encontrado procesos organizativos de víctimas que emprenden, con completa convicción y voluntad, procesos que reivindican la memoria y exigen verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición”, señaló
Roberto Menéndez, Jefe de Misión. 

Desde este 9 de abril, y durante todo el mes, la MAPP/OEA se une a la campaña: “Por las víctimas, 9 millones de historias para no repetir” liderada por la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas (UARIV), un homenaje nacional de conciencia social hacia las víctimas del conflicto armado, al que se sumarán más de 8.000 establecimientos educativos del país.

Con las víctimas, MAPP/OEA 20 años aportando a la paz

Este 2024, la Misión cumple 20 años de presencia ininterrumpida en Colombia, y desde sus inicios ha acompañado a las víctimas del conflicto armado, escuchando, conociendo, monitoreando y alertando sobre sus problemáticas, generando recomendaciones al Estado colombiano respecto a las afectaciones y victimización a las comunidades, las mujeres, los niños, niñas, adolescentes y jóvenes, los pueblos étnicos y los liderazgos sociales en los territorios.

La MAPP/OEA ha estado al lado de las víctimas en momentos clave. A partir del 2005 y durante los inicios de los mecanismos de justicia transicional en el país, acompañó a las víctimas de desplazamiento, desaparición forzada y otros hechos en el acceso al Modelo de Justicia Transicional dispuesto por la Ley 975 de 2005, en más de 300 jornadas de atención, llevadas a cabo por la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación (CNRR) y la Fiscalía General de la Nación.

Posteriormente, con la firma en 2011 de la Ley 1448 o Ley de Atención y Reparación Integral a las Víctimas, la MAPP/OEA incorporó dentro de su mandato el monitoreo y acompañamiento a las víctimas y a la institucionalidad en la expedición, implementación y extensión de esta Ley. Por esto, ha acompañado a las Mesas de Participación de Víctimas, así como a la elección de las 16 Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz (CITREP) que amplió su representación y la de los territorios más afectados por el conflicto en el Congreso de la República. En la ruta de reparación colectiva, sigue acompañando a los Organismos de Acción Comunal y a algunos de los 407 Sujetos de Reparación Colectiva, ubicados en 101 zonas de atención prioritaria (ZAP), en diferentes regiones del país, como a la comunidad del Corregimiento El Aro, en Ituango, Antioquia; la comunidad de Bojayá
en el Chocó; el Pueblo Barí en Catatumbo, Norte de Santander; el Consejo Comunitario del Rio Yurumanguí, en Buenaventura, Valle del Cauca, entre otros.

Desde la promulgación de esta ley, la Misión ha entregado recomendaciones a la Unidad de
Restitución de Tierras (URT) y a la Jurisdicción especializada en restitución de tierras y territorios, así como a las comunidades campesinas, indígenas y afrocolombianas víctimas de despojo. Su labor ha permitido generar confianza entre distintos actores, y ha contribuido a visibilizar problemáticas en
los territorios y a acercar la institucionalidad a las comunidades más apartadas del país. Fue así como en 2012, la MAPP/OEA apoyó la publicación de “La prueba social y de contexto en el proceso de restitución de tierras”; en 2017, acompañó el proceso de traducción y publicación de la primera sentencia de restablecimiento de derechos territoriales a favor de la comunidad indígena del Pueblo
Yukpa a su lengua materna, impulsó la estrategia de reconciliación y tratamiento de tensiones sociales con segundos ocupantes y opositores en 2018 y aportó en la estrategia de apoyo político ante situaciones de riesgo extraordinario de funcionarios de la URT en 2023.

Desde 2017, la Misión monitorea y acompaña al Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y Garantías de No Repetición, a las instituciones que lo integran como la Comisión de Esclarecimiento de la Verdad (CEV), a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), y a la Unidad de Búsqueda de personas dadas por desaparecidas (UBPD) y, sobre todo, a las víctimas frente al acceso a sus derechos.

Precisamente, durante los 3 años de mandato de la CEV, la MAPP/OEA contribuyó en la elaboración del Informe Final. Así mismo, ha estado al lado de las organizaciones de víctimas, de derechos humanos y comunidades étnicas en la presentación de informes ante la Sala de Reconocimiento y la posterior apertura de macrocasos por parte de la JEP.

Después de 20 años, la MAPP/OEA reafirma el compromiso de seguir acompañando a las comunidades y a las víctimas afectadas por la crisis humanitaria y la persistencia de la violencia, así como a continuar trabajando al lado de las instituciones que deben garantizar la prevención, atención, respuesta humanitaria y garantías de no repetición ante situaciones de emergencia.

El trabajo que realiza la MAPP/OEA es posible gracias al apoyo político y financiero de los países miembros del Fondo Canasta: Alemania, Canadá, Chile, España, Estados Unidos, Irlanda, Italia, Países Bajos, Reino Unido, Suecia y Türkiye; así como también a las contribuciones de Argentina, Noruega y
Suiza.